Pica las nueces, mézclalas con el chocolate y reserva.
Pon la mantequilla derretida en un bol grande y vete agregando e incorporando el eritritol, la yema de un huevo y la leche de almendra.
Precalienta el horno a 170ºC / 330ºF.
Añade a la mezcla la harina de almendra, la harina de coco, el polvo de hornear y el cacao en polvo. Remueve bien, primero con la espátula y luego con las manos hasta que esté bien mezclado.
Agrega las nueces y el chocolate y sigue mezclando hasta que esté uniformemente repartido.
Pon papel de hornear o una lámina de silicona en la bandeja del horno y vete haciendo bolitas para formar las galletas. No las coloques demasiado juntas. Después aplástalas con los dedos.
Hornea entre 15 y 20 minutos a 170ºC / 330ºF, según las quieras más suaves o más crujientes.
Déjalas enfriar para que endurezcan y ¡a disfrutar!
[icon name="check" class="" unprefixed_class=""] Si pones las pepitas o trozos de chocolate en la nevera, se incorporarán más fácilmente a la masa y no estarán grasientas cuando las incorpores.[icon name="check" class="" unprefixed_class=""] Se conservan perfectamente varios días en un recipiente hermético.[icon name="check" class="" unprefixed_class=""] Si quieres conocer más información sobre el edulcorante que he utilizado, te dejo este artículo sobre el eritritol.